Nuestros genitales: así somos

Es posible que lo que menos nos llame la atención cuando se trata de aprender algo sobre nuestra sexualidad, sea precisamente la anatomía y fisiología del sexo. Es lógico. Siempre no lo han presentado como algo aburrido y de poca importancia para nuestro placer y vida sexual, o lo que es peor, se ha negado la participación de todo nuestro cuerpo incluyendo los genitales en nuestra vida sexual.

Es importante entender que la diferencia genética más evidente entre los seres vivos es su sexo, su género. No existe ninguna característica morfológica que nos distinga tanto como el hecho de ser machos o hembras. Estas características propias hacen fascinante el conocimiento del cuerpo humano y especialmente el nuestro.

Igualmente cierto es que el solo hecho de conocer detalladamente nuestros genitales y su funcionamiento, no basta para que actúen por si solos y nos den placer. Es necesario entender que su adecuado funcionamiento esta ligado a una serie de aparatos y sistemas coordinados entre sí (ej. El sistema neuroendocrino, el aparato circulatorio). Así pues, no se trata solamente de lo genital. Puesto que si bien, lo sexual se expresa físicamente con los genitales, es en realidad como resultado de una concatenación con otros aspectos de nuestras vidas y nuestras historias, entre ellos el aspecto social, el emocional y el educativo.

Muchas mujeres siguen considerando la vagina como el órgano sexual femenino, quizá por que es más fácil hablar de lo que no se ve, negando así una parte de nuestra sexualidad. La verdad es que la vagina es un órgano genital, que si bien tiene alguna función sexual no podríamos decir que es el órgano sexual femenino por excelencia. Tendríamos que hablar y conocer otros órganos que si se pueden tocar, ver y que dan sensaciones placenteras y que pocas veces se habla de ellos. Por eso es importante conocer sobre el cuerpo, y los genitales para poder aceptarse y aprender sobre sí mismas; de esta manera podemos establecer relaciones de pareja y sexuales más placenteras.

Genitales femeninos externos:
El conjunto de los genitales femeninos externos es llamado vulva.

La vulva cumple una función exclusivamente sexual, un papel erógeno y en ningún momento reproductivo.

La vulva se compone de:
1. Los labios externos o mayores: son dos repliegues cutáneos, carnosos y de color ligeramente más oscuro que la piel que los rodea y cubiertos parcialmente por vellos.

2. Los labios internos o menores: son también dos pliegues cutáneos situados dentro de los mayores, son finos y desprovistos de vello. Se caracterizan por una abundante inervasión, que es lo que le da su gran sensibilidad y una rica red de vasos sanguíneos que se dilatan en los estados de excitación sexual. A cada lado de los labios menores se hallan las glándulas de Bartholin, que segregan unas pocas gotas de fluido cuando la mujer se excita sexualmente.

3. El clítoris: situado en el punto de unión de los labios menores. Es el centro de la excitación sexual femenina. Tiene forma cilíndrica y su única porción parcialmente visible es la cabeza. El interior esta formado por un tejido esponjoso y por vasos sanguíneos que se congestionan haciendo aumentar su tamaño durante los periodos de excitación sexual. Este órgano, concentra como ningún otro, gran cantidad de terminaciones nerviosas que lo hacen en extremo sensible al tacto, la temperatura y la presión. Es el único órgano exclusivamente erótico del ser humano. Vale la pena anotar que, dada la gran sensibilidad del clítoris, su estímulo directo y prolongado puede provocar en ocasiones dolor en lugar de placer y, obviamente, constituir un obstáculo para la excitación.

4. La entrada vaginal o vestíbulo: es la zona en forma de almendra, dentro de los labios menores, donde aparecen la vía urinaria o meato urinario: que esta conectada con la vejiga urinaria por la corta uretra de la mujer. Y la apertura vaginal.

Vagina

Genitales femeninos internos:
Los genitales internos de la mujer son:
1. El himen: es una membrana de tejido que bloquea parcialmente la entrada de la vagina de algunas mujeres cuando no han tenido relaciones sexuales. Tiene diversas formas, tamaños y diferentes grados de elasticidad. En general el orificio del himen deja pasar un dedo sin molestia alguna y sin que se rasgue, lo cual permite practicar exámenes ginecológicos sin problema alguno. Cuando se realiza el primer coito el himen puede ser lo suficientemente elástico para permitir el paso del pene sin rasgarse. En algunas mujeres, es tan delgado que ni siquiera es percibido al realizar el primer acto sexual. En otros casos es algo más grueso, de modo que su ruptura produce un leve dolor y el derrame de unas gotas de sangre. Y en otros casos, menos frecuentes, es tan grueso y resistente que hay que extirparlo quirúrgicamente para hacer el coito agradable, o incluso posible.

2. La vagina: Es un conducto delgado y elástico formado por varias capas de músculos, y tiene una longitud de 7 a 8 cm, que comunica el útero con la vulva. En realidad es un órgano de comunicación entre la vulva, órgano de carácter sexual y los órganos internos que son, en sentido estricto, los de la reproducción. Esta constituida por dos paredes, una anterior y otra posterior, y por la elasticidad de sus paredes, se expande o se contrae para amoldarse fácilmente a un dedo, al pene o a la cabeza y cuerpo de un bebe durante el parto. Esta capacidad le permite albergar un pene pequeño o uno grande, adpatandose perfectamente a su tamaño sin que se presente dificultad alguna durante el coito. El interior de la vagina está tapizado por una mucosa que la mantiene húmeda y produce lubricación vaginal cuando la mujer se excita sexualmente.

Los siguientes son los órganos reproductores internos femeninos, ya que su única función es la de reproducción y no tienen ninguna función dentro de la actividad sexual. Estos órganos se encuentran contenidos en la pelvis y son:

3. El útero: El útero o matriz, es un órgano muscular hueco, de paredes gruesas. Tiene la forma de una pera con el vértice hacia abajo. Su parte inferior, la más estrecha se denomina cuello del útero o cervix. Las principales funciones del útero son contener y proteger el producto de la concepción durante la gestación. Y cuando no hay embarazo permite el desprendimiento y salida de parte del endometrio durante la menstruación.

4. Las trompas de Falopio: Son dos órganos tubulares que se encuentran a cada lado en el extremo superior del útero. Su función principal es dar paso al espermatozoide y al óvulo y servir de asiento a la fecundación.

5. Los ovarios: Son dos uno a cada lado del útero, allí se almacenan los óvulos. El ovario tiene dos funciones básicas. La primera es la producción, maduración (ovogénesis) y expulsión (ovulación) de los óvulos. La segunda función ovárica es la producción de hormonas.

 

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Claudia Campos. MHS

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