Solo hasta hace muy pocos años el tema de la menopausia ha sido de interés para la comunidad médica en general y para las mujeres, en particular porque la expectativa de vida no permitía a un gran número de mujeres llegar a esta etapa. Pero hoy la situación es diferente, la esperanza de vida ha aumentado considerablemente y tenemos un número cada vez mayor de mujeres en los años de la menopausia y posmenopausia.
Por eso es tan importante que las mujeres tomemos un rol activo frente a los cambios que ocurren en esta etapa, que asumamos el derecho a preguntar, investigar y ser dueñas de nuestra vida y de los cambios que ella nos trae.
Un buen comienzo es preguntar a nuestro ginecólogo/a las inquietudes que podamos tener con respecto a esta etapa de la vida y prepáranos para este proceso de vida llamado menopausia.
La menopausia es una etapa en la vida de la mujer que se produce a raíz del cese de la función ovárica, consiste en la falta de secreción de estrógenos y en la ausencia de ovulación regular por parte del ovario que da como resultado la desaparición de la menstruación.
Este proceso puede darse entre los 45 y 55 años, tiempo en donde se presentan cambios físicos y emocionales. En la vida de todas las mujeres estos cambios son normales y pasajeros y dependen de factores individuales a cada mujer.
La premenopausia, es la época anterior a la menopausia, se da uno o dos años antes del retiro de la menstruación y se caracteriza por la presencia de sangrados irregulares, acompañados de manifestaciones de tipo psicosomático.
Cada mujer vive esta etapa de manera diferente. Algunas no tienen molestias, pero otras sienten malestares emocionales y físicos. Por ejemplo muchas mujeres se vuelven más sensibles y nerviosas. Y con frecuencia, se ponen tristes o deprimidas. Algunos de los cambios emocionales pueden coincidir con situaciones de la vida diaria o creer equivocadamente que la vida sexual se acabo y que estas envejeciendo.
Tanto los malestares emocionales como los fisicos se pueden reducir si la mujer que comienza a sentirlos esta informada, si conoce su cuerpo y los cambios y sobre todo si comparte las dudas con personas de confianza o con otras mujeres que estén en una situación parecida, y ante todo si cuenta con el cariño y el apoyo de su pareja o sus familiares.
Recordemos que la gran mayoría de los problemas se dan por falta de información; por eso lea, infórmese, conozca su cuerpo, las posibles reacciones y las soluciones; de esta forma cuando llegue al periodo de su menopausia, no la tomará por sorpresa.
Claudia Campos. Psicóloga Clínica. Sexóloga y Terapista de Pareja. 240-426-3756
Claudia Campos, Ps, MHS